Trastornos digestivos
Se realizan diferentes sesiones según los cambios que va experimentando el paciente en el tratamiento.
Causas y síntomas
Los trastornos digestivos tienen diversas causas: deficiencia del sistema inmunológico o funcionales. El cerebro intestinal que se ocupa de la digestión está producido por un complejo sistema neuroendocrino. El mediador químico se denomina ‘serotonina’, encontrada en el 90% del tracto gastrointestinal. Representa un papel importante en reflejos peristáltico, nauseas, vómitos y secreción biliar y pancreática. También está relacionado con síntomas de depresión (sueño, humor, agresión, temperatura corporal, apetito sexual, ira, entre otros).
Se estima que 1 de cada 5 adultos padecen de alteraciones en el sistema digestivo. Se producen movimientos intestinales irregulares (diarrea, estreñimientos, dolor abdominal, nauseas, flatulencias, dolor de cabeza, gastritis, colon irritable, diverticulosis, bulimia, esofagitis, anorexia, hernia de hiato, ulceras, entre otros). Pueden estar producidos por estrés y malos hábitos alimenticios. Hay frases que se asocian a estas dolencias como «piedras en el estomago», «comer vidrios», «tragar sapos» o «esto no lo puedo tragar».
Enfermedades autoinmunes digestivas
- Enfermedad de Crohn: inflamación crónica final del intestino delgado y al primero del colon. En algunos casos pueden estar afectados otros órganos del sistema digestivo.
- Anemia perniciosa: el estómago no fabrica la vitamina B12 en el tracto gastrointestinal, la cual es importante para la formación de glóbulos rojos.
- Enfermedad Celíaca: ataca las vellosidades del intestino delgado en respuesta a la presencia del gluten que se encuentran en el centeno, avena, trigo o cebada, y esto puede ocacionar graves problemas.
Tratamiento
Sistema neuroendocrino: glándulas suprarrenales, hipófisis, tiroides, diafragma, sistema digestivo, sistema inmunológico y sistema nervioso.