Cualquier suceso puede producir estrés, por ejemplo: ruidos, congestión de tránsito, malas posturas, hacinamientos, hambre, falta de sueño; y en el aspecto emocional: muerte, desempleo, problemas de pareja, mudanza, entre otros.

Síntomas

Estados de angustia, pérdida de emotividad para realizar tareas habituales, llantos constantes sin motivo, miedo a estar solo, falta de memoria y concentración, dormir mucho, falta de apetito, ansiedad, entre otros.

Tratamiento

Áreas reflejas a tratar especialmente: glándula pituitaria hipófisis, tiroides, diafragma, plexo solar, riñón, páncreas y toda la columna vertebral.